Por Fausto Triana
La Habana, 20 abr (PL) Gabo ya no está, pero el viento sopla todavía, diría Vincent Van Gogh si tuviera vida para comprender, en su lucidez intermitente, que se nos ha ido Gabriel García Márquez, probablemente el más entrañable y querido escritor latinoamericano de todos los tiempos.
Otras plumas de largo alcance y vuelo estarían quizás a su altura, al lado o hasta por encima. Quien sabe. Empero su impronta extraordinaria e imperecedera, su espíritu controversial y supremamente humano, colocan su nombre en el pedestal de los elegidos.
Nadie que haya leído Cien años de soledad, su obra cumbre que le valió el Premio Nobel de Literatura en 1982, pudo olvidar las historias de Macondo y los Buendía, una suerte de reinvención de Aracataca, su pueblo natal de Colombia, y de toda esa inmensa y espléndida imaginaría que nos hizo soñar tantas veces. Sigue leyendo →